Observar un jardín significa aprender a vivir despacio
Parar. Y descubrir la lengua de aquello que habla sin palabras

Sumergirse en el silencio
Dejarse inundar
Nadar en él

SILENCIO nace del encuentro entre Miraim Garlo, Andrea Díaz y sus dos poéticas; la Lengua de Signos (LSE), el teatro visual y la manipulación objetual. Una obra sobre nuestra capacidad de escucha y observación, en la que tanto personas oyentes como sordas, compartirán un espacio común de comprensión y contemplación.

Objetos, cuerpo y manos. Cuerpos humanos, vegetales, voladores y marinos. Un mundo inundado del que rebrota un mundo nuevo. Y cuyo resultado no es ni una obra de teatro objetual ni la simple escenificación de la LSE, sino algo más confuso y propio.